Cualquier actividad que se quiera realizar necesita una licencia de apertura de actividad.
El tipo de licencia de apertura varía en función de la actividad comercial que se va a desarrollar y por tanto, la documentación y los informes que se deben presentar se diferencian dependiendo del tipo de licencia.
La normativa vigente diferencia los tipos de licencia en dos grupos en función de la actividad:
Actividades nocivas o clasificadas. Aquellas que pueden resultar molestas, insalubres o peligrosas para las personas y medio ambiente. El proceso de obtención es más largo y costoso, ya que se exige un proyecto técnico completo y su posterior aprobación por el Ayuntamiento.
Actividades inocuas o no clasificadas. Aquellas que no generan molestias, son salubres y no causan daños al medio ambiente ni a las personas. Requiere pocas comprobaciones, por lo que el trámite es rápido y sencillo.