• Reducción del consumo energético del edificio, manteniendo o mejorando las condiciones de habitabilidad y confort interior
• Estudio de la envolvente de la edificación, verificando cual es el caso óptimo a implementar, en cuanto sistema constructivo y aislamiento, de las mejoras que permitan optimizar el rendimiento térmico.
• Análisis de la influencia de la iluminación natural de los recintos, para determinar las necesidades de iluminación artificial.
• Estudio económico las alternativas evaluadas, para poder comparar la necesidad de inversión frente a la mejora obtenida.